Desde hace un mes y medio estoy a dieta, los 97 kilos me pesaban ya mucho y decidí bajar al menos a los 85. Para ello en mi dieta he reducido a cero las grasas, bajado los hidratos de carbono y solo me quedan las asquerosas proteínas de la pechuga de pavo a la plancha. Esta dieta por si sola puede valer, pero siempre es mejor ayudarla con algo de ejercicio.
Mi ejercicio es pescar pateándome los pantanos de la provincia de Jaén y parte de los de Córdoba detrás de los blacbas. Cuando no es posible la pesca recurro a los paseos al atardecer. El otro día estaba yo de paseo mas para olvidar la idea obsesiva del bocadillo de jamón que últimamente me asalta, incluso en los sueños de este duermevelas continuo con el que convivo, que por hacer ejercicio y quemar calorías, cuando me suena el móvil. Era un criador amigo mío para hablar de un diamante Mandarín que esta muy grueso y que ha decidido soltar en un voladero para que así pierda peso. En ese momento entre los que mi mente pasaba del la obesidad del pájaro a la crujiente placidez del bocata de jamón pensé en colgarle, pero decidí que me distraería hablar un poco de nuestros pájaros y de ese posible problema que es la obesidad en ellos.
No se ha escrito mucho sobre el tema, recuerdo solo un artículo de Enrique Moreno en la revista Pájaros hace ya unos 15 años, y poco mas.
La obesidad es una forma grave de sobrepeso que se asocia a un exceso de grasa corporal. Para Enrique Moreno la obesidad de un pájaro se presentaba cuando el peso del animal era el normal o natural mas un 15%. Para P. D. Sturkie solo es un proceso fisiológico por el cual el organismo de un ave es capaz de depositar grandes cantidades de grasa corporal, producto de un exceso de consumo de energía en el alimento, hasta el punto de que este engrasamiento es negativo para la salud del ave y causa de descendimiento de los parámetros productivos.
Se diagnostica solamente por la observación del abdomen y pecho del pájaro para determinar si hay grasa subcutánea en exceso. En principio si se localiza esta grasa en el pecho estamos ante un caso de obesidad, pero si solo lo hace en el abdomen, es algo normal. ¿Pero es frecuente?, pues mas de lo que a veces imaginamos y no precisamente en el momento que la diagnosticamos, como podremos ver mas adelante.
¿Afecta a todas las especies por igual?, pues, no, según E. Moreno es mas frecuente en psitácidas y paseriformes. Y además cita que hay factores o situaciones que la pueden favorecer: Primarios como la especie, tipo de alimentación, estado reproductivo, falta de ejercicio, predisposición genética, ambiente. Y Secundarios: Disfunciones metabólicas del tiroides por ejemplo o la administración de fármacos.
Personalmente no estoy totalmente de acuerdo con todos estos factores citados, en mi opinión la obesidad tiene como causa prima en las aves una alimentación desequilibrada y sedentarismo.
También para Moreno en la dieta debe haber un equilibrio entre energía y proteína, si este equilibrio se vuelca hacia el lado de la proteína el organismo baja el uso de las reservas grasas. Mientras que un incremento de la energía en detrimento de la proteína provoca una acumulación grasa pues el animal ingiere muchísimo mas alimento y no para hasta que así logra sus requerimientos mínimos de proteína. De esta forma recomienda una dieta con un 16 ó 18% de proteína y un 6 u 8% de Grasa.
En realidad, cuando un pájaro come lo que hace es ingerir energía, en un primer momento esta energía o el total de la ingesta se denomina ENERGIA TOTAL. Pero esta hay que restarle la que se excreta en forma de heces o PERDIDA FECAL. Tras esta perdida solo queda la ENERGIA DIGESTIBLE que es la que se aprovecha en el organismo. Pero hay mas perdidas como la PERDIDA URINARIA que generalmente es acido úrico. Así llegamos a tener en el organismo del pájaro solo ENERGIA METABOLIZABLE que suele representar un 70 a 90% de la Energia Total. Esta Energia Metabolizable es la que utilizara el animal, pero aún hay mas perdidas de energía que se ha ingerido, como por ejemplo con la puesta de huevos, esta perdida es conocida como ACCION DINAMOESPECIFICA. Al final solo queda una energía denominada ENERGIA NETA. Si esta Energia Neta es superior a la consumida por el animal en su fisiología diaria hay depósitos de la sobrante en forma de grasa. Y esta energía consumida por el animal debe ser igual a la consumida por su METABOLISMO BASAL o de lo contrario aparecerá la grasa.
P. D. Sturkie cita que el metabolismo basal se puede calcular para cada ave y se expresa en Kcal/24 horas. Y así sabemos que este METABOLISMO BASAL para un gorrión de 27,3 gramos de peso en un verano de Inglaterra es de 8,51 Kcal/24 horas y en las mismas condiciones para un palomo de 266 gramos es de 33,7 kcal/24 horas y para un gallo de 2,000 gramos de 280 kcal/24 horas. Este metabolismo basal es superior en las aves de mayor tamaño, pero comparándolo con la unidad de peso vivo (Kcal/Kr/24 horas) disminuye a medida que aumenta el peso, así si el peso de un ave es el doble al de otra pueden hacerse comparaciones entre el M. B. de aves de diferentes pesos.
El conocer el metabolismo o necesidades de nuestras aves es muy importante para determinar la dieta que les daremos y no es igual un canario Raza Española de 12 gramos que uno de color de 35 gramos. O un diamante Mandarín de 27 gramos.
Además del peso, el M. B. depende de la edad, sexo, ritmo diurno (ya hablaremos de esto en otra ocasión), ayuno y alimentación, temperatura corporal, temperatura ambiente, humedad, climatología, muda y pluma, actividad endocrina, etc.
En conclusión, las aves pequeñas como el Raza Española tiene niveles metabólicos muy altos que le acercan al límite del funcionamiento metabólico. Esto nos induce a pensar que la obesidad es más propia de razas pesadas o de especies que se seleccionan en ellos un mayor tamaño o peso que el que tiene el individuo ancestral como es el caso del diamante Mandarín. Esto quiere decir que la obesidad se presentara con mas frecuencia en razas o variedades mas pesadas.
Así en estos casos esta mayor frecuencia de obesidad se debe a un crecimiento mas rápido y a que suelen ser razas anabólicas (animales grandes, tranquilos y de perfil convexo). Estos animales son incapaces de mantener una tasa de reproducción si se le permite comer libremente y sin un adecuado gasto calórico. Esta tasa se va a ver afectada sobre todo por:
OVULACIONES ERRATICAS, puesta por la tarde, ciclos anormales y puestas dobles en un mismo día.
HUEVOS DEFECTUOSOS (de doble yema o también en fárfaras, así como obstrucciones)
Se ha comprobado en gallinas y puede que lo mismo ocurra con nuestros pájaros que una sobrealimentación durante la pubertad tendrá efectos sobre el ovario del ave cuando alcance la madurez sexual. Ya que en el ovario tendrán mas folículos y desarrollados sin un orden cronológico por lo que al inicio de la puesta se producen trastornos implicando esto una vida fértil mas corta. También en los pájaros adultos hay una disminución de la motilidad del oviducto que se manifiesta al exterior con puesta de huevos en el abdomen al retroceder estos por el oviducto. Situación que no tiene que representar un problema para la salud del ave.
El problema de la obesidad es mas peligroso en la pubertad que en la edad adulta que precisamente es cuando mas nos preocupamos. Es importante definir una curva óptima de crecimiento de las pájaras nuevas para evitar una mala relación entre el peso corporal y la eficiencia en la reproducción (Virgilio Pacheco Gonzales, Universidad de San Marcos de Lima).
Para Enrique Moreno además la obesidad influía en una bajada de defensas, alteración hepática, alteraciones cardiovasculares, diabetes mellitus, lipomas, alteraciones plantares, etc.
Pero en realidad el mayor efecto de la obesidad es el efecto reproductivo al verse alterado el desarrollo de los quistes que implican una alteración de la puesta.
Como tratamiento Enrique Moreno recomendaba aumentar en la dieta la fibra, bajar las grasas y las calorías, administrar un complejo ADE (Liposoluble), medicar con metionina, colina (Calcicolina), Yodo, etc.
El problema es que una animal como un pájaro es difícil cambiarle la dieta, así que solo queda bajar la cantidad de mixtura y aumentar la ración de verdura además de soltar el animal en un voladero donde para conseguir agua, comida y percha tenga que recorrer alguna distancia y emprender el vuelo.
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