La historia del canario (Serinus canaria, Linnaeus 1758) es imprecisa ya que aunque parezca extraño hay pocos textos y muchos de ellos además no son fiables en su veracidad. El historiador canario Juan Regulo Pérez (1914-1993) así lo reconoce en una charla dada en el II Coloquio de Historia Canario-Americana “nadie, absolutamente nadie, se había ocupado en Canarias de la historia del canario”. Y lo cierto es que tampoco muchos más lo hicieron fuera de las islas de las que salio. Pero a pesar de estos inconveniente casi, solo casi, podemos precisar como, donde, cuando y quien expandió esta ave cantora por todo el mundo.
La historia empieza el año 1402 cuando Jean de Béthencourt tras vender sus bienes para financiar su expedición, y asociarse al navegante francés Gadifer de la Salle, zarpó desde el puerto francés de La Rochela para proceder a la conquista de las islas Canarias el primero de mayo de 1402. Esta labor había sido encargada por el rey castellano Enrique III y financiada por la Santa Sede, en calidad de privilegio, al tío de Béthencourt, Robert de Braquemont, quien delegó en él. Se trataba de un mercenario o corsario, amante del dinero, cruel y dicen que padecía lepra. Para llegar a las Islas Canarias primero hizo escala en Cádiz donde tras un motín vio reducida su tripulación de 280 a 53 hombres. En las Islas Canarias tras pisar suelo en Lanzarote fracasa en su misión y tiene que regresar a España en busca de apoyos económicos y hombres. Regresa de nuevo a Lanzarote, donde había dejado a La Salle, con un decreto real que le da el Señorío de Lanzarote y con una Orden Papal del Papa Luna (Benedicto XIII) para crear el Obispado del Rubicón. Termina de conquistar Lanzarote y se lanza al asalto de Fuerteventura fracasando de nuevo en Gran Canaria y La Palma. Así en 1404, después de que surgieran desavenencias con La Salle (que huyó de las islas) y con la ayuda del monarca castellano, había conquistado Lanzarote y Fuerteventura, y un año más tarde, El Hierro y La Gomera (1405). De esta historia se puede pensar que los primeros canarios que llegaron a España lo hicieron desde Lanzarote entre el año 1403 y 1404, siendo improbable que fueran de otra isla ya que no se habían tocado por la expedición o estaba sin conquistar. Por cierto que Ramón de Fonseca cita que los mejores canarios eran los de Lanzarote y en concreto los que había en una montaña denominada Alegranza ya que si bien eran mas pequeños y de cola mas larga, su canto era muy bueno. Los primeros canarios debieron llegar a España en 1403 cuando Béthencourt regreso en busca de apoyos, pues si pensaba pedir algo debía de llevar algo como presente al rey y aparte de esclavos poco mas habría en las Canarias. Tobeña Rami y Ferrer Kutter apuntan que llego a Europa en el año 1417, esta fecha es muy tardía ya que Béthencourt murió en 1425 y había conquistado las islas en el 1405 y para el 1418 vendido al conde de Niebla los derechos del feudo que gobernaba (por cesión de Castilla) en calidad de rey. Lo mas probable es que en 1403 ya se presentaron los primeros canarios en la corte de Castilla y que Enrique III de Castilla fuese el primer rey que los disfruto.
En contra de esta idea existe una teoría de Félix Pérez y Pérez que apunta en su libro “Canaricultura” de que el canario ya se conocía anteriormente al 1403 por medio de cierta expedición que el rey Alfonso VI de Aragón envió a las islas el año 1330. Este dato no es muy fiable ya que el rey de Aragón en ese año era Alfonso IV El Benigno que llego al trono el 1328. Pienso que se trata de un error de imprenta y que en realidad se refería a este último. No obstante no he encontrado nada con respecto a esta supuesta expedición y Pérez y Pérez no cita su fuente.
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